Estamos aquí disfrutando nuestra libertad garantizada con la declaración de independencia. Hemos trabajado horas sin cuento para pasar una ordenanza protegiendo nuestra privacidad. Ningún restaurante, cafetero, ni negocio tiene el derecho de saber tu estado de la vacuna o cualquier infeccion te afecta hoy. Ordenanza 1577 es el primer paso contra la discriminacion que vemos en la ciudad de los angeles, y nuestras familias.
El grupo de Palmdale Freedom Coalition se ha hecho menos como grupo, y más como una familia. Hemos celebrado el Dia de Gracias, Navidad, Pascua, y en seguido un año juntos. Publicamos un periodico nuevo cuando el papel “Valley Press” describió este grupo, ustedes, extremistas. Nos apoyamos el uno al otro porque cuando una mamá llega llorando que sus hijos fueron discriminados en la escuela por los maestros y ayudantes, todos llegan a la escuela, hablan al director, mandan letras electrónicas, y vocalizan las desagregaciones al consejo escolar cuando se juntan.
Luchamos por los derechos de todos porque lo que le afecta a uno, en poco tiempo les afecta a todos. Yo que no tengo hijos hablo en frente del consejo escolar por los daños que veo. Tus hijos buscan la protección de adultos porque sienten la discriminacion en nuestro mundo. Ojalá que lis llantos no caigan en oídos sordos. Estamos hoy juntos para darles la herramienta necesaria para proteger a su criatura y la libertad de todos.
En el grupo de Palmdale Freedom Coalition, los curiosos, desafectados, y aislados, encuentran que no están solos. Símbolos como una cara libre, una bandera americana, se hacen como un faro para encontrar hermanos y hermanas nuevas. Miembros me han contado que pasaron la navidad solos porque la familia no quería sentarse con una persona sin la vacuna. Este tipo de separación me da tanta tristeza porqué el amor de la sangre no debe de tener condiciones.
Queremos que todos sean invertidos en esta lucha y entendemos que a veces no hay suficiente horas en un dia. La libertad es una de esas cosas que no pasamos a nuestros hijos como color de pelo o altura. Hay fuerzas opresivas que nos empujan a buscar una vida nueva en otro país. Arriesgamos a veces todo para ser libres, o dar la oportunidad a la criatura. La oscuridad siempre nos sigue porque donde hay luz, hay sombra. Hasta que la luz se enfoque en los espectros directamente, nuestro brillo estará empañado. Estamos unido en esta lucha para el futuro de nuestra comunidad y te invitamos. Hispano con Negro, Chino con Arabe, vecino con vecino.
Una hora de tu día, una letra electrónica, una llamada al consejo o representante del estado de California sin duda es la cosa más poderosa que uno puede hacer. Nuestros representantes deben de representar nuestra comunidad, pero muchas veces llegan a su posición y se les olvida su juramento. En vez de preguntarle a la gente cuando hay dudas, hacen lo que sienten al contrario de la comunidad y apoyan su posición con, “Yo soy el que ganó la elección.” Esa actitud destruye la confianza de la gente porque al principio piensan que tiene los sentimientos de la gente en su corazón, pero de verdad lo alzan en la bolsa con el dinero de organizaciones políticas.
No somos mudos, tenemos una voz. Unidos, cambiamos el clima de la ciudad, unidos salvamos nuestro futuro.
English Translation:
We are here today celebrating our freedoms guaranteed by the Declaration of Independence. We’ve worked countless hours to pass an ordinance protecting our privacy. No restaurant, cafe, nor business has the right to know your vaccination status or what illness afflicts you today. Ordinance 1577 is the first step against the discrimination we’re seeing in Los Angeles and our own families.
The group, Palmdale Freedom Coalition has become less of a group and more like a family. We’ve celebrated Thanksgiving, Christmas, Easter and soon we’ll celebrate one year together. We’ve published a new newspaper when the local paper, Valley Press, described this group, all of you, as extremists. We support one another because when a mother comes crying because their child was discriminated against by teachers and staff, we all show up at school, call the principal, send emails, and vocalize our dissatisfaction when the school board meets.
We fight for the rights of everyone because what affects one, in time affects us all. I myself, who does not have children, speak to the school boards because of the damage I’m seeing. Your children are seeking the protection of adults because they feel the discrimination in our world. Hopefully their cries for help don’t fall on deaf ears.
In the group, Palmdale Freedom Coalition, the curious, disaffected, and isolated find they’re not alone. Symbols like an unmasked face or an American flag are like beacons to find a new brother or sister. Members have told me they spent Christmas alone because their family did not want to sit with an unvaccinated person. This type of segregation gives me such sadness, because family bonds should not have conditions.
We hope everyone becomes invested in this fight and we understand that there are not enough hours in a day. Freedom is one of those things that we don’t pass on to our children like hair color or height. There are oppressive forces that push us to seek a new life in another country. Sometimes we risk everything to be free, or to give that opportunity to our children. Darkness always follows because where there is light there is shade. Until we focus our light onto the specters directly, our brilliance will always be dulled. We are united in this fight for the future and we invite you. HIspanic with Black, Asian with Arab, neighbor with neighbor.
One hour of your day, one email, one phone call to the council or representative of California without a doubt is the most powerful thing you can do. Our representatives should represent our community, but all too often they get to their position and they forget their oath of office. Instead of asking the community when there is a doubt, they do what they want and support their decision with, “well, I won the election.” This attitude destroys public confidence because at the beginning they think you have their best interests at heart, when in reality, they’re in your pocket with money from political organizations.
We are not mute, we have a voice. United we will change the climate of our city, united, we will save our future.